Solidaridad
Las cifras aumentan año tras año

 

El proyecto Esperanza, de las religiosas adoratrices, ha atendido a 231 víctimas de Trata en 2017

 

El 60% de las mujeres tienen entre 18 a 30 años y la mayoría experimenta una mejoría durante los diez primeros días de apoyo

 

 

El Proyecto Esperanza-Adoratrices, que trabaja desde el año 1999 ofreciendo un apoyo integral a las mujeres víctimas de Trata, ha atendido desde su fundación hasta diciembre de 2017 a un total de 983 mujeres de 60 nacionalidades. La ayuda basada en las necesidades individuales es esencial para la recuperación física, psicológica y social.

 


 

 

Según la última memoria de esta asociación, el 60% de mujeres atendidas es muy joven, con edades comprendidas entre 18 - 30 años. El 91% de las mujeres acogidas han experimentado una mejoría en los 10 primeros días.

El año pasado, 15 mujeres accedieron a una beca de estudio y 37 lograron un empleo a través del departamento de inserción sociolaboral.

Por otra parte, el departamento jurídico de este proyecto ha atendido a 126 mujeres víctimas de la trata para facilitarles el ejercicio efectivo de sus derechos, el acceso a la justicia, así como a una situación administrativa regular.

 

Estatus legal

El 40% de ellas adquirió estatus legal y 53 de 56 lograron acreditar su identidad. Nigeria es el país de procedencia que concentra un mayor número de mujeres atendidas por el proyecto, seguido Camerún, R.D Congo, Costa de Marfil, Rumanía y Paraguay.

La directora de proyecto Esperanza, Ana Almarza, afirma que las cifran aumentan año tras año: un 16% más que en 2016. El proyecto a cargo de la Congregación de Religiosas Adoratrices está compuesto por un equipo de 19 profesionales y voluntariado, que se coordinan de forma interdisciplinar y desarrolla su trabajo a través de una Red de Recursos Residenciales -casa de emergencia y primera acogida, casa de consolidación, dos pisos de autonomía- y un Centro Día, ubicados en la Comunidad de Madrid.

Esta red está conectada con la Red de Centros y Servicios para Mujeres de la Comunidad de Madrid, a través de un concierto firmado con esta institución desde al año 2007.  A esta asociación derivan mujeres identificadas por las Fuerzas de Seguridad del Estado o instituciones públicas como la oficina de Asilo y Refugio.

 

Gravísimas violaciones 

Iris Rodríguez, Coordinadora del Área de Intervención Directa, explica que se atienden a mujeres que han sufrido gravísimas violaciones de los derechos humanos. “Con el apoyo especializado, adecuado e individualizado logran, en la mayoría de los casos, retomar sus vidas y conseguir los objetivos que ellas mismas se han marcado”.