Servicio diario - 16 de julio de 2018


 

Vídeo del Papa a los jóvenes de las Antillas: "Si están instalados la cosa no va"
Rosa Die Alcolea

Sínodo de los obispos: El Papa nombra a 4 Presidentes Delegados
Redacción

Dicasterio de Comunicación: Cercanía y colaboración con los obispos de África Oriental
Rosa Die Alcolea

Haití: Nombramiento del arzobispo metropolitano de Cap-Haïtien
Redacción

Beato Pablo (Pedro) Gojdič, 17 de julio
Isabel Orellana Vilches


 

 

 

16/07/2018-10:21
Rosa Die Alcolea

Vídeo del Papa a los jóvenes de las Antillas: "Si están instalados la cosa no va"

(ZENIT — 16 julio 2018).- "¿Son jóvenes o jóvenes envejecidos? —pregunta el Papa en el vídeo—. Porque si son jóvenes envejecidos no van a poder hacer nada. Tienen que ser jóvenes 'jóvenes'".

El Santo Padre envió un vídeo-mensaje a los participantes en la Asamblea de jóvenes de la Conferencia Episcopal de las Antillas (AECYA), que se celebra en la archidiócesis de Saint-Pierre y Fort-de-France, en Martinica, del 10 al 23 de julio de 2018.

"Con toda la fuerza de la juventud para transformar: Francisco llama así a los jóvenes que quieren transformar la familia del Caribe. "Lindo trabajito", les confiesa. "Se ve que tienen garra y quieren luchar. Sigan adelante".

Lo primero que tienen que hacer es ver si se "instalaron", les aconseja el Pontífice. "No, si están instalados la cosa no va. Tienen que desinstalarse los que están instalados, y empezar a luchar".

 

Transformar

"Ustedes quieren transformar, quieren llevar adelante y han hecho suyas las directivas de la Exhortación post-Sinodal sobre la familia para llevar adelante la familia, para transformar la familia del Caribe", señala el Papa. En esta línea, el Santo Padre les anima a "saber describirla, saberla comprender para enfrentar el mañana".

Para ello, les exhorta a leer el capítulo cuarto de la Exhortación: "ahí está el núcleo. Estúdienlo. Véanlo y van a tener las pautas de progresión. Pero hoy y mañana. Nos queda el ayer. No se puede mirar al mañana sin mirar al ayer.

No se puede mirar el futuro sin reflexionar sobre el pasado".

 

Raíces

Francisco indica a los jóvenes la importancia de las raíces: "Ustedes se preparan para transformar algo que les fue dado por sus mayores. Ustedes reciben historia de ayer, reciben tradiciones de ayer".

"Ustedes tienen raíces —recuerda el Papa— y sobre esto quiero detenerme un minutito: no se puede hacer nada en el presente ni en el futuro si no estás arraigado en el pasado, en tu historia, en tu cultura, en tu familia; si no tenés las raíces bien metidas adentro. De la raíz te va a venir la fuerza para seguir adelante".

El Papa explica que todos nosotros no fuimos fabricados en un laboratorio, "tenemos esa historia, esas raíces". Y lo que hagamos, los frutos que demos, la belleza que podamos hacer en adelante, "vienen de esas raíces".

Así, les exhortó a mirar hacia atrás también para tener raíces: "miren a sus abuelos, miren a sus viejos y hablen con ellos, y tomen eso y lo llevan adelante. Transformado, pero ahí van a tener las raíces, la fuerza para transformar la familia. Es una tensión transformante. No se puede transformar sin tensión".

 

Amoris laetitia

"No se olviden de una cosa: El amor tiene fuerza propia", motiva el Papa argentino a los jóvenes de las Antillas. "Ustedes están transformando algo que es para toda la eternidad. Esa fuerza propia que quedará para siempre".

El Pontífice les anima a seguir el núcleo de Amoris laetitia para esta misión, el capítulo cuarto de la Exhortación. "Cómo vivir el amor. Cómo vivir el amor de la familia. Hablen entre ustedes sobre el capítulo cuarto. Ahí van a tener mucha fuerza para seguir adelante y hacer la transformación", aclara.

 

 

16/07/2018-11:12
Redacción

Sínodo de los obispos: El Papa nombra a 4 Presidentes Delegados

(ZENIT — 16 julio 2018).- En vista de la XV Asamblea General Ordinaria sobre el tema Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional (3 al 28 de octubre de 2018), el Santo Padre ha nombrado como Presidentes Delegados a:

— Cardenal Louis Raphaél I Sako, Patriarca de Babilonia de los Caldeos, Jefe del Sínodo de la Iglesia Caldea (Iraq).

— Cardenal Désiré Tsarahazana, Arzobispo de Toamasina (Madagascar).

— Cardenal Charles Maung Bo, salesiano, Arzobispo de Yangon (Myanmar).

— Cardenal John Ribat, Misionero del Sagrado Corazón de Jesús, Arzobispo de Port Moresby (Papúa Nueva Guinea).

La Oficina de Prensa de la Santa Sede publicó los nombramientos el pasado sábado, 14 de julio de 2018.

 

3 funciones

Estos cuatro Delegados fueron creados cardenales por el Papa Francisco.

Según las Reglas del Sínodo, el Presidente Delegado "en el nombre y con la autoridad del Romano Pontífice preside la Asamblea". Es nombrado por el Papa "y su función cesa con la disolución de la Asamblea para la que fue nombrado". Si el Papa "ha confiado a varias personas para presidir la Asamblea, se turnarán para presidir.

El presidente tiene tres funciones: dirigir el trabajo del Sínodo; asignar funciones específicas a algunos de los miembros, cuando parezca apropiado permitir que el trabajo de la Asamblea proceda de manera más efectiva; y firmar las Actas de la Asamblea.

Con Anne Kurian

 

 

16/07/2018-18:51
Rosa Die Alcolea

Dicasterio de Comunicación: Cercanía y colaboración con los obispos de África Oriental

(ZENIT — 16 julio 2018).- Paolo Ruffini, Prefecto del Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede, dirigió un mensaje de "cercanía" y "colaboración" a los miembros de las Conferencias Episcopales de África Oriental (Amecea) con ocasión de su 19' Asamblea Plenaria, informa 'Vatican News' en español.

La Iglesia en África —señaló Ruffini— puede contar con la constante colaboración del Dicasterio para la Comunicación "para difundir no solamente el Mensaje del Evangelio y la voz del Santo Padre, sino también las noticias sobre la Iglesia 'vivaz' del continente, sus aconteceres, desafíos y su dolor".

El encuentro durará diez días, inició el 13 de julio en Adis Abeba, Etiopía, y ofreció al nuevo jefe del Dicasterio la ocasión de recordar la Asamblea especial para África del Sínodo de los Obispos del 1994, evento, que, entre otras cosas, abrió el camino a inversiones significativas "en las estaciones de radio diocesanas", favoreciendo la estrecha colaboración con la Radio Vaticano.

 

Medios vaticanos

"Esta sinergia —ha precisado el Prefecto— continuará incluso en el contexto de la reforma de los medios vaticanos, que ya está dando frutos".

Fueron las palabras de Paolo Ruffini en el marco de una "creciente integración, colaboración y cohesión" entre los medios de comunicación de la Santa Sede, en efecto también Radio Vaticano ha entrado a formar parte de este nuevo escenario, "debido al cambio del panorama de los medios informativos en el mundo", explicó.

La actual convergencia de los medios digitales, es un tema sobre el cual en muchas ocasiones se ha detenido el Papa, y esta convergencia no debe permitir el abandono progresivo de los países con escaso acceso a las nuevas tecnologías digitales.

"La reforma de los medios vaticanos no quiere descuidar ni abandonar estos países, de los cuales un número significativo se encuentra en África", aseguró Ruffini.

Radio Vaticano sigue transmitiendo en las nuevas plataformas digitales, pero conserva también sus modalidades de transmisión tradicional como las frecuencias de onda corta para los países que necesitan este servicio.

 

Esperanza y paz para África

Asimismo, el Prefecto del Dicasterio para la Comunicación habló de la maravillosa coincidencia entre el encuentro del Amecea en Addis Abeba y la renovada voluntad de Etiopía y Eritrea de construir la paz.

"En medio de tantos conflictos, como recordó el Papa en el Ángelus del primero de julio, el deseo de diálogo entre los dos países del Cuerno de África representa una luz de esperanza para todo el continente africano", indicó el dirigente del Dicasterio.

 

 

16/07/2018-16:58
Redacción

Haití: Nombramiento del arzobispo metropolitano de Cap-Haïtien

(ZENIT — 16 julio 2018).- El Santo Padre Francisco ha nombrado arzobispo metropolitano de Cap-Haitien (Haití) a Mons. Launay Saturné, hasta ahora obispo de Jacmel.

Información publicada por la Oficina de Prensa de la Santa Sede, este lunes 16 de julio de 2018.

 

Mons. Launay Saturné

Monseñor Launay Saturné nació el 14 de enero de 1964 en Delatte (Petit-Goáve) en la archidiócesis de Port-au-Prince. Fue ordenado sacerdote el 10 de marzo de 1991 para la archidiócesis de Port-au-Prince.

Después de su ordenación sacerdotal ocupó los siguientes cargos: vicario parroquial en el Sacré-Coeur de Turgeau en Port-au-Prince (1991-1997); Director de la casa preparatoria de Jacquet para la archidiócesis de Port-au-Prince. De 1998 a 2003 continuó sus estudios en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, obteniendo un Doctorado en Teología Dogmática (Eclesiología). Desde 2003 es Director de Estudios y Profesor de Teología en el Seminario Mayor Interdiocesano de Port-au-Prince. Además, desde 2004 ha sido Responsable del Comité a cargo de la Pastoral Mariana en la misma archidiócesis, y desde 2005 Secretario Nacional de la Comisión de Pastoral Juvenil en Haití.

El 28 de abril de 2010 fue nombrado obispo de Jacmel y recibió su consagración episcopal el 29 de mayo siguiente. Desde noviembre de 2017, es Presidente de la Conferencia Episcopal Haitiana.

 

 

16/07/2018-11:47
Isabel Orellana Vilches

Beato Pablo (Pedro) Gojdič, 17 de julio

«Obispo mártir del comunismo en Checoslovaquia, murió en prisión por causa de la fe, defensor de los judíos, reconocido 'Justo entre las Naciones' por el Yad Vashem»

Este prelado, que murió siendo prisionero por defender la fe, logró lo que se propuso al asumir la sede de su diócesis: «Con la ayuda de Dios, yo quiero ser un padre de los huérfanos, de los pobres y consuelo de los afligidos». En él se cumplió el vaticinio de Pío XI cuando el 29 de marzo de 1927 le recibió en audiencia y le obsequió con una cruz pectoral de oro, diciéndole: «Esta cruz es sólo un débil símbolo de las pesadas cruces que Dios enviará sobre ti, hijo mío, en tu trabajo como obispo».

Nació el 17 de julio de 1888 en Ruské Peklany, localidad cercana a Prešov, Eslovaquia. Su padre era un sacerdote de la iglesia greco-católica (bizantina). Estudió en Cigelka, Bardejov y Prešov. En esta última ciudad cursó estudios de teología, que completó en el seminario de Budapest. Llevado de su gran devoción por el Sagrado Corazón, se había consagrado a él y diariamente reiteraba su promesa diciendo: «Todas las oraciones, sacrificios y cruz las ofrezco para compensar los pecados de todo el mundo».Fue ordenado junto a su hermano en 1911 y durante unos meses auxilió a su padre.

Un año más tarde comenzó a asumir misiones que permitían vislumbrar una carrera imparable. Fue prefecto de una escuela-hogar infantil, instructor de religión de centros docentes de secundaria, coadjutor en Sabinov, y canciller del obispado, entre otras. Pero él ambicionaba una vida escondida. Y en 1922 tomó una decisión, acogida con sorpresa por quienes le conocían: ingresó en el monasterio de San Nicolás, en Chernecha Hora, perteneciente a la Orden de san Basilio el Grande. Emitió los votos al año siguiente y eligió el nombre de Pablo. Pensaba que la austeridad del claustro era la vía más excelente para poder servir a Dios. Pero la Providencia actuó en una línea distinta de la que soñó, y en 1926 fue nombrado administrador apostólico de la eparquía de Prešov.

Su afán por consolar a todos, como enseguida anunció, debió vivirlo con tanto celo que la gente terminó reconociéndole como un «hombre de corazón de oro». Se sentía orgulloso de sus raíces eslavas, y su primera carta pastoral fue dedicada al 1100 aniversario del nacimiento del apóstol que evangelizó su país, san Cirilo. Fue director del apostolado de la oración, fuente de la que se alimentaba junto con la Eucaristía. Pasaba gran parte de la noche en la capilla, delante del Sagrario. Esa entrega orante explicaba la dilatación milagrosa del tiempo; revertía en multitud de acciones apostólicas. En 1927 fue designado obispo titular de Harpasa y consagrado en la basílica de san Clemente de Roma. En 1939 pusieron bajo su responsabilidad la administración apostólica de Mukačevo. Su acción pastoral tuvo tal repercusión que se convirtió en un «aguijón en la carne» para el gobierno eslovaco. Presentó su renuncia, pero el papa no la admitió. Es más, en 1940 le nombro obispo titular de Prešov,y en 1946 asumió la jurisdicción de la iglesia greco-latina de toda Checoslovaquia. Como tenía gran devoción por María puso a la eparquía, y a sí mismo, bajo la protección de la Virgen de Klokočov.

Fue adalid de la causa judía, prestó ayuda a los refugiados y prisioneros, y liberó a presos de los campos de concentración. Por todo ello los servicios de seguridad eslovacos lo tenían en el punto de mira. Antiguos miembros de la Iglesia católica que se habían pasado al otro bando no ocultaban su hostilidad por su labor; no entendieron el ósculo fraterno que depositó públicamente en la frente de los judíos que se habían convertido. En 1950 el gobierno comunista lo detuvo, y lo recluyó en la cárcel. En un simulacro de juicio fue procesado y condenado a cadena perpetua. Los judíos escribieron al presidente checo, pero fue en balde. Los opresores trataron de disuadirle ofreciéndole la posibilidad de salir del país, pero él lo rechazó. Sabía que se jugaba la vida; antes le habían ido aislando del clero y de los fieles. Le temían porque sus obras de caridad, su esfuerzo para promover la vida espiritual y fortalecer la fe católica era algo que había calado hondamente en gran parte del pueblo. Ahí estaban las obras de un gran apóstol: parroquias nuevas, orfanatos, escuelas católicas, colegios, textos de espiritualidad, etc. Siempre apoyando a los huérfanos, jóvenes, comunidades y prensa religiosas. Una labor prodigiosa.

Cuando le propusieron renunciar a la fe católica y separarse de la Sede Apostólica manifestó: «Tengo 62 años, sacrificaré mis bienes y mi residencia, pero no negaré mi fe de ningún modo porque quiero salvar mi alma…». Lo trasladaron de prisión en prisión para engañar a la gente, haciendo creer que no estaba preso. Le obligaron a realizar trabajos humillantes, fue maltratado psicológicamente y sometido a crueles torturas, recluido en celdas de aislamiento, etc. No se quejó. Rezaba y decía misa clandestinamente. En 1953 mediante amnistía conmutaron su pena de cadena perpetua a 25 años de prisión, pero no quiso acogerla. Al cumplir los 70 de vida Pío XII le felicitó con un telegrama asegurándole que no olvidaría nunca a tan heroico hijo. Había ido enfermando de gravedad. Y cuando le condujeron a la clínica de Brno, después de haber pasado por la consulta de varios médicos que decían no haber hallado nada en su organismo, se le diagnosticó cáncer terminal.

Murió en la prisión eslovaca de Leopoldov el 17 de julio de 1960, justamente el día de su 72 cumpleaños, habiendo podido confesarse y recibir los sacramentos. Llevaba diez de martirio en los que había asegurado: «La persecución y el sufrimiento sólo fortalecerá nuestra fe y acercarnos más a Cristo y a su Iglesia». «Yo no odio a mis enemigos. Quiero acercarlos a Cristo, por supuesto, no por la fuerza o el engaño, sino por el amor y la verdad». El gobierno lo rehabilitó en 1990. Juan Pablo II lo beatificó el 4 de noviembre de 2001. En 2007 fue reconocido «Justo entre las Naciones» por el Yad Vashem.