Cáritas | Noticia • 19 Marzo 2019

 

Cáritas Mozambique alerta de que el impacto del ciclón «Idai» podría ser la mayor catástrofe en décadas

 

Cáritas Española pone en marcha una campaña de emergencia para canalizar la ayuda humanitaria a los damnificados.

 

 

 


 

 

Cáritas Mozambique ha alertado de que, a la vista de los primeros datos de evaluación de pérdidas humanas y materiales, el impacto causado por el ciclón “Idai” el pasado 14 de marzo en buena parte del país podría suponer la mayor catástrofe registrada en las últimas décadas.

La destrucción ha sido devastadora en muchas regiones debido a la serie de lluvias torrenciales y vientos huracanados que han estado azotando entre octubre de 2018 y este mes de marzo las provincias del centro y norte de Mozambique, y que habrían afectado seriamente a más de 13.000 familias. Los efectos del ciclón han afectado también al vecino Zimbabue.

 

El 90 % de Beira, destruido

Las autoridades locales han informado de que el 90 por ciento de Beira, una ciudad portuaria con medio millón de habitantes y la segunda más poblada del país, ha sido destruido. Y aunque el ciclón tocó tierra el pasado jueves, los equipos de ayuda no consiguieron acceder a la ciudad hasta el domingo.

Cáritas Mozambique ha movilizado todos sus recursos para poner en marcha un plan de respuesta humanitaria esta catástrofe, que se enfrenta a las serias dificultades de acceso terrestre a muchas de las áreas siniestradas, que están completamente inundadas.

 

Prioridades

Antonio Anosso, responsable de ayuda humanitaria de Cáritas Mozambique, señala, en un informe de urgencia remitido a toda la red Cáritas, que “todavía nos enfrentamos a algunos desafíos para obtener información de Beira, porque no hay comunicación”.

“La máxima prioridad para nuestro personal en la zona es rescatar a las personas, proporcionar alojamiento temporal e identificar a las personas afectadas. Aunque carecemos de recursos suficientes para responder a las necesidades más urgentes de alimentos, agua y material de refugio”, añade.

Cáritas Mozambique está preparando 1.500 mantas para enviarlas a Beira lo antes posible. Asimismo, han partido desde Maputo dos equipos de Cáritas hacia las provincias de Sofala y Zambezia, las más afectadas, para llevar a cabo una identificación de necesidades de urgencia.

El ciclón y las lluvias precedentes han arrasado amplias zonas del país, destruyendo infraestructuras y comunicaciones, e inundando poblaciones enteras de las provincias de Sofala, Zambezia, Tete, Niassa, Manica y Cabo Delgado.

Por el momento, las Cáritas Diocesanas de las zonas afectadas están colaborando en los planes iniciales de respuesta de emergencia, facilitando la evacuación de las personas que han perdido sus casas a los albergues habilitados por las autoridades, así como acogiéndolos en iglesias y edificios parroquiales.

 

Solidaridad de Cáritas Española

Cáritas Española ha transmitido su solidaridad a Cáritas Mozambique, además de ofrecer la máxima colaboración en los planes de emergencia que se vayan articulando, en coordinación con la red de Cáritas Internationalis y con la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECID).

Asimismo, ha abierto la campaña Cáritas con Mozambique para canalizar la solidaridad de los donantes privados españoles con esta emergencia.

Cáritas Española ha llevado a cabo en la última década un intenso trabajo de cooperación fraterna con la Cáritas de ese país africano, donde ha apoyado números proyecto de desarrollo en ámbitos de sostenibilidad alimentaria, educación, salud, respuesta a emergencias y lucha contra el tráfico de personas, entre otros.

 

«Estar cerca para verlo todo»

Esta emergencia se produce cuando Cáritas Española acaba de lanzar, bajo el lema “Hay que estar cerca para verlo todo”, una ambiciosa campaña de carácter anual para movilizar el apoyo económico privado a los proyectos de cooperación internacional que actualmente desarrolla en más de 60 países de todo el mundo.

Es en situaciones de urgencia como la que ahora vive Mozambique, donde Cáritas demuestra esa capacidad para “estar cerca” de las personas afectadas por situaciones de urgente precariedad como la provocada por el ciclón “Idai” y que necesitan nuestra cercanía y mucha de nuestra solidaridad. Porque para estar cerca de verdad hay que verlo todo.