Política

 

El plan abortista de Irene Montero: eliminar el papel tutelar de los padres

 

La propuesta del Gobierno no hace otra cosa que aumentar el desbarajuste jurídico que se ha establecido en torno a los menores con respecto al aborto y las mayorías de edad

 

 

23 octubre, 2020 | ForumLibertas.com


 

 

 

 

 

La ministra de Igualdad, Irene Montero, se ha comprometido a regresar a una propuesta muy discutida cuando Zapatero reformó la Ley del aborto en España: permitir a las jóvenes de 16 y 17 años abortar sin que sus padres lo lleguen a saber.

La propuesta no deja de enfrentarse al derecho de los padres a educar y guiar a sus hijos, al menos hasta que sean mayor de edad. Un paso más para liquidar el papel tutelar de los padres sobre sus hijos menores de edad.

Asociaciones pro vida han señalado sobre la iniciativa de Irene Montero que se va a dejar en una situación de desprotección a las adolescentes. Desde la Fundación +Vida y desde el Foro de la Familia la argumentación se centró en el rechazo a toda la Ley de la Interrupción Voluntaria del Embarazo. Una ley que el gobierno de Rajoy modificó en lo referente a las menores, pero desistió de cambiar en su conjunto. Estas asociaciones pidieron así “medidas reales y efectivas” para que las mujeres puedan seguir adelante con sus embarazos.

“Sería un retroceso –se indicó desde Derecho a Vivir– porque se disminuyen las garantías de las menores ante el drama del aborto y se impide a los padres ejercer el derecho de formación y consejo a sus hijos conforme a sus valores”.

Desde la Associació de Drets Sexuals y Reproductius, de la que depende el Centre Jove d´Atenció a les Sexualitats, Silvia Aldavert explicó a La Vanguardia que la mayoría de menores acude –al margen de las leyes en vigor– con sus madres. Pero hay un pequeño grupo de chicas en situación de violencia en sus hogares, con desarraigo familiar, incluso algunas que viven ya fuera del núcleo familiar para las que esta reforma es básica, indicó, ya que si no al final se acaba recurriendo a abortos clandestinos o a maternidades no deseadas. También se dan casos de discrepancia familiar por motivos religiosos.

 

¿Son o no son menores?

La propuesta de Irene Montero no hace otra cosa que aumentar el desbarajuste jurídico que se ha establecido en torno a los menores con respecto al aborto, como el hecho de que puedan acceder a la pastilla ‘del día después’ sin ningún tipo de control y sin autorización paterna.

No deja de sorprender también que la mayoría de edad esté establecida en los 18 años para poder decidir en temas como el votar para elegir a los representantes políticos, obtener el carné de conducir, consumir alcohol o comprar y consumir tabaco.

Sin embargo, aunque a los adolescentes de 16 años no se les considera preparados para optar a estos derechos, el Gobierno sí les supone maduros para decidir sobre la continuidad o no de una vida humana, recurriendo al aborto, o para asumir los riesgos físicos y psíquicos que se derivan del mismo.

De todo ello se deduce que Irene Montero considera estos riesgos menores que los referentes al consumo de tabaco, conducir o simplemente votar. O sea, a los 16 no puedes decidir sobre quién será tu alcalde, pero estás maduro para decidir finalizar una vida humana.