Tribunas

María 1.0

 

 

José Francisco Serrano Oceja


 

 

 

 

 

Me entero por la Revista “Hogar de la Madre”, de las siempre reconfortantes Siervas del Hogar de la Madre de Dios, que existe el Movimiento María 1.0., gracias a una entrevista que publican con la joven estudiante post de la Universidad de Einchstätt, Clara Steinbrecher.

Y me entero que María 1.0 es una iniciativa nacida como reacción a María 2.0. Ya no sé si reír o llorar.

De momento, sigo. Afirma Clara que “nuestro objetivo es mostrar que existen católicos que sostienen la verdadera doctrina de la Iglesia Católica y la experimentan como el fundamento maravilloso de su vida. Y queremos testimoniar esto públicamente, también en los medios de comunicación”.

Le alabo el gusto.

Sigo leyendo: “Intentamos proclamar la enseñanza católica de la manera más clara y comprensible y defenderla, especialmente allí donde ha sido formulada con poca claridad o incluso hasta se la niega”. Vamos bien, sin duda.

Le preguntan por el Camino Sinodal Alemán y aclara bien las cosas. Le preguntan cómo participa María 1.0 en el Camino sinodal y contesta: “Una representante de María 1.0, la señora Dorotea Schmidt, ha sido invitada por la Conferencia Episcopal Alemana a participar en el Camino Sinodal y toma parte como invitada. Aquí quiero hacer una aclaración importante: el Camino sinodal no es en absoluto un Sínodo, aunque dé esa apariencia y reivindique el derecho. Desgraciadamente las apariciones de la señora Schmidt y de algunos otros participantes que piensan como nosotros son ampliamente ignoradas”.

Sigue la entrevista. Habla el periodista, o la periodista, porque no encuentro la firma de la entrevista: “¿Existen también unos desarrollos positivos en la Iglesia en Alemania gracias a la iniciativa María 1.0 y gracias a la Virgen María?”.

Y contesta: “A través de María 1.0 y María 2.0 se pone en evidencia una controversia que hace entender a los católicos que tienen que decidirse, porque en la Iglesia no existen cosas a medias. Porque habéis sido tibios… Podríamos aún decir que muchos católicos se sienten representados por nuestra iniciativa y así quedan fortalecidos en la fe, y con renovada alegría se enfrentan a la vida cada día…”.

Entiendo que María 1.0 vino después como respuesta a la existencia del movimiento María 2.0. María 1.0, la originaria, la auténtica. María 2.0, una nueva versión evolucionada de María. María 1.0 podría haberse llamado María -2.0. No sé. O podían haber utilizado otro nombre. Utilizar el nombre de María me da un poco repelús.

De momento no he visto nada parecido por aquí. Pero no descarten que un día…

 

 

José Francisco Serrano Oceja