Tribunas

Los obispos tienen un problema… y no sé si lo saben

 

 

José Francisco Serrano Oceja


 

 

 

 

 

Primer escenario. Viernes 13 de enero. Rueda de prensa de presentación del documento “El Dios fiel mantiene su alianza” (DT 7,9), que aprobó la Asamblea Plenaria de Noviembre de 2022.

Un documento del que habrá que escribir largo y tendido, pero que es, por razones varias, uno de los mejores textos episcopales de los últimos tiempos.

Un documento que representa la mejor síntesis de la crítica de fondo y de forma que se puede hacer del gobierno de Pedro Sánchez. Textos de la Conferencia Episcopal que analicen y deslegitimen las políticas sociales de Sánchez ha habido muchos, a medida que se iban aprobando determinadas leyes.

Pero no ha habido un texto con una visión de conjunto como éste, que transciende también lo contingente, un escrito que parta de un análisis de las corrientes de fondo de lo que está ocurriendo en la sociedad actual, de los procesos configuradores de lo personal, lo relacional, lo institucional, como éste.

Intervención de monseñor Luis Argüello, que tiene que ver mucho con la autoridad y la autoría del texto. Unos treinta minutos. Turno de los periodistas. Tres preguntas, una de ellas doble.

La primera, con una lógica advertencia del preguntador, que dice que no pensarán que puedan hacer preguntas sobre un texto de más de cien páginas que se ha entregado en ese momento a los periodistas. Lo que pueden hacer es preguntar sobre lo que ha visto pasando páginas durante la intervención del obispo.

Pregunta sobre los organismo internacionales que condicionan la actuación de los gobiernos en materia de políticas sociales. Pregunta que marca los titulares primeros de agencia.

Segunda pregunta, una televisión a la que le interesa el conflicto entre PP y VOX en Castilla y León a propósito del aborto. Claro, don Luis, arzobispo de Valladolid. Respuesta que sirvió para que algunas televisiones le hayan dado, y bien, a monseñor Argüello.

Tercera pregunta, doble. La primera, si es un texto de Argüello, de los obispos, cuál es su autoría, cuál fue su proceso, etc. Y, segunda pregunta, qué opina del vídeo de Shakira contra Piqué.

De momento me reservo la conclusión de este primer escenario. También las cuestiones de técnica de comunicación pública.

Segundo escenario. Dejo a un lado la información de los digitales durante el viernes. Apunta ya a que es y va a ser escasa.

Sábado. Los digitales de referencia, silencio en la cristiandad. Ediciones de papel. Una cata a modo de muestra. Ausencia de portadas. Noticia en “La Razón”. El “ABC” se pone a la cabeza con un breve en sección enfoque y una noticia amplia que titula “Enmienda a la totalidad de los obispos a las nuevas leyes sociales”.

“El País”, en un día cuya noticia principal de portada es una polémica política sobre el aborto, en un día que editorializa torticeramente sobre el aborto, ni una sola línea.

“El Mundo”, ni una sola línea sobre el documento. Por cierto, con un texto ese día, en el suplemento LOC, del profesor de Comillas, Fernando Vidal, sociólogo y cristiano de pro, director de la Cátedra de alguna de las investigaciones citadas por los obispos en su documento.

Un texto que podíamos imaginar fuera una presentación del documento episcopal. Pues no. Un artículo andanada a Tamara Falcó, y a la exposición pública de su fe católica, que tiembla el misterio. Analizado detenidamente, daría para mucho.

Tercer escenario. Domingo. El día de la gran prensa. Nada de nada. A excepción de quien esto escribe, ni un solo columnista que haya leído el documento de los obispos, que lo analice, que lo glose, que lo comente, que ponga en valor su trascendencia.

Cuarto escenario. Los digitales dedicados a la información eclesial. Noticias de la presentación. Y poco más, esperemos que de momento.

Ustedes mismos habrán sacado las conclusiones.

¿A quién interesa lo que dicen los obispos? ¿Qué papel están jugando los medios? ¿Qué están haciendo los obispos para que a los medios, a la sociedad, a los políticos, les interese lo que dicen? ¿Se están pisando la manguera entre los bomberos? ¿Alguien ha dado alguna instrucción al respecto?

Y otras muchas preguntas…

 

 

 

José Francisco Serrano Oceja