Familia

 

Un congreso pide el reconocimiento del homeschooling como opción educativa por la libertad

 

José Pérez Adán: “Hay padres que quieren enseñar a sus hijos en casa. No es un rechazo al colegio, es una elección”

 

 

 

23/10/25


 

 

 

El IV Congreso Nacional de Educación en Familia, que se celebra en Valencia los días 24 y 25 de octubre, reúne a juristas, pedagogos y profesores universitarios para reclamar que la educación en el hogar sea reconocida legalmente en España. José Pérez Adán, uno de los organizadores, asegura que la educación en familia es una opción legítima “por y para la libertad”, y que muchos padres solo piden poder elegir sin miedo a ser sancionados.

 

 

 

  1. “No es un rechazo al colegio, es una elección”
  2. Una práctica permitida en Inglaterra
  3. Una alternativa ante el fracaso del sistema
  4. Algunas ventajas
  5. Entre la ideología y la libertad

 

 

 


José Pérez Adán,
Universidad Libre Internacional de las Américas.

 

 

 

El Palacio de Colomina-CEU acoge este fin de semana el Cuarto Congreso Nacional de Educación en Familia/Homeschooling, organizado por la Universidad Libre Internacional de las Américas (ULIA) y la Asociación por la Libre Educación, bajo el lema “Por el reconocimiento del homeschooling como opción educativa”.

Durante dos días, expertos de distintas universidades españolas abordarán el fenómeno del homeschooling desde sus dimensiones jurídica, pedagógica y social. Pero más allá de los debates académicos, el encuentro busca lanzar un mensaje claro: el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos.

 

“No es un rechazo al colegio, es una elección”

José Pérez Adán, profesor universitario y sociólogo, participa como moderador en la mesa redonda sobre Análisis pedagógico e inserción social, y es además uno de los impulsores del congreso. En conversación con Religión Confidencial, defiende que “a futuro, la educación en familia decantará como algo normal, en la medida en que crezcan las disfunciones y fallas de la apuesta obligatoria por un único sistema de escolarización”.

Para Pérez Adán, la motivación de las familias homeschoolers no es huir de la escuela, sino ejercer una opción educativa coherente con sus convicciones y su estilo de vida. “Hay padres que quieren enseñar a sus hijos en casa. No es un rechazo al colegio, es una elección”, afirma. “El problema es que en España el homeschooling es todavía una realidad alegal: ni está prohibido ni reconocido. En comunidades como Galicia, la Administración ha llegado a amenazar a padres ejemplares que simplemente deseaban educar a sus hijos en el hogar”, denuncia.

 

Una práctica permitida en Inglaterra

Mientras tanto, países como Inglaterra lo tienen regulado. Allí los niños que se educan en casa se examinan, hay un seguimiento por parte del Estado y los padres siguen un programa. "Aquí, en cambio, las familias viven con el temor de que el Estado les penalice, les lleve a juicio o incluso amenace con retirarles la patria potestad”, señala Pérez Adán.

También en Dinamarca, Lituania y, en general, en los países del Este —que han sufrido durante mucho tiempo la tiranía—, la escolarización en el hogar está permitida.

El sociólogo considera que un primer paso sería la legalización del homeschooling, incluyendo las garantías necesarias para proteger el derecho a la educación de los niños y la libertad de los padres. “El principal objetivo de la educación en casa es la libertad: mayor libertad para educar y por la libertad como principio”, subraya.

 

Una alternativa ante el fracaso del sistema

El organizador del congreso advierte que el actual modelo educativo atraviesa una crisis profunda. “El fracaso escolar es una realidad en España que se está generalizando hacia arriba, hacia la universidad, con la estandarización de títulos, cada vez más alejada de las necesidades y oportunidades laborales”, explica.

A su juicio, “hay demasiada ideología en las aulas y, cada vez, menos seguridad y libertad”. Frente a ello, valora positivamente el modelo de formación profesional dual, “que se blinda eficazmente al estar insertado desde el inicio en el mercado laboral, a modo de un businesschooling”.

 

Algunas ventajas

El homeschooling, añade, podría ser también un remedio para el ocaso familiar que sufre la sociedad española. “Es ilógico que, en algunas familias, ambos cónyuges trabajen a tiempo completo fuera de casa para pagar un colegio no público y una ayuda doméstica, cuando si trabajase a sueldo uno solo, o se turnasen, podrían hacerse cargo de una familia mayor”, razona.

La posibilidad del trabajo a distancia y la vida en zonas rurales —añade— “abre la puerta a que muchas familias opten por educar en casa, viviendo fuera de la ciudad y contribuyendo al repoblamiento de la España vaciada”.

 

 

 


Cartel del Congreso.

 

 

 

Entre la ideología y la libertad

Pérez Adán insiste en que no se trata de enfrentarse al Estado, sino de pedir reconocimiento. “Lamentablemente, en nuestro país, como en muchas otras cosas, caminamos en sentido contrario: el de la imposición burocrática desde los estamentos del poder, que confunde la igualdad con la uniformización”, lamenta.

Ante las críticas sobre la falta de socialización, Pérez Adán responde que “el problema está resuelto: los niños que estudian en casa se apuntan a actividades extraescolares, deportivas o culturales. No viven aislados. Lo importante es que los padres tengan la posibilidad de elegir”.

El congreso de Valencia quiere ser, por tanto, un punto de encuentro entre familias, expertos y juristas que reclaman una legislación clara y respetuosa con la libertad de conciencia y el derecho de los padres a decidir.

Como resume José Pérez Adán, “la educación en casa es, sobre todo, una cuestión de libertad: la libertad de los padres para educar, y la libertad de los hijos para crecer en un entorno familiar coherente y seguro”.