EL EVANGELIO DEL DOMINGO

 

 

por Gervasio Portilla García

26.09.2021


 

XXVI Domingo del Tiempo Ordinario (B)

 

 

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS (9, 38-43. 45. 47-48)

 

En aquel tiempo, dijo Juan a Jesús:

― «Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre, y se lo hemos querido impedir, porque no viene con nosotros».

Jesús respondió:

― «No se lo impidáis, porque quien hace un milagro en mi nombre no puede luego hablar mal de mí. El que no está contra nosotros está a favor nuestro. Y el que os dé a beber un vaso de agua porque sois de Cristo, en verdad os digo que no se quedará sin recompensa. El que escandalice a uno de estos pequeñuelos que creen, más le valdría que le encajasen en el cuello una piedra de molino y lo echasen al mar. Si tu mano te induce a pecar, córtatela: más te vale entrar manco en la vida que ir con las dos manos a la gehenna, al fuego que no se apaga. Y, si tu pie te induce a pecar, córtatelo: más te vale entrar cojo en la vida que ser echado con los dos pies a la gehenna. Y si tu ojo te induce a pecar, sácatelo: más te vale entrar tuerto en el reino de Dios que ser echado con los dos ojos a la gehenna, donde el gusano no muere y el fuego no se apaga».

 

Palabra del Señor


 

COMENTARIO:

 

El Evangelio de este Domingo Vigésimo Sexto del Tiempo Ordinario, presenta orientaciones prácticas, a fin de que la comunidad sea pujante en su fe y en el seguimiento a Jesús.

El cristiano de ayer y de hoy, debe alegrarse por cuanto bien se haga en el mundo, tanto dentro como fuera de la Iglesia.

El buen cristiano debe colaborar con todo aquello que promocione valores acordes con el Evangelio, aunque el móvil de su actuación sea distinto.

Todo lo que no se opone al Evangelio, contribuye también a realizar el Reino de Dios, lo mismo que hay que solidarizarse en la lucha contra el mal: drogas, injusticias, terrorismo, leyes inicuas que no protegen la vida y la libertad y cualquier otra forma que genere el mal.

A continuación Jesús habla del escándalo, una llamada contundente al ejemplo de vida de todos los cristianos, evitando todo aquello de desoriente en la fe y en la conducta de los creyentes.

 

Hasta el próximo Domingo si Dios quiere. Paz y bien.